La pierna de pollo campesino proviene de aves criadas en condiciones más naturales, generalmente en ambientes libres o semi-libres, con alimentación a base de granos y sin hormonas ni antibióticos. Su carne es más firme, sabrosa y de color más intenso en comparación con el pollo industrial, lo que la hace ideal para preparaciones tradicionales y caseras que resaltan su sabor auténtico.